Las aventuras de Tintín pasan del cómic a la gran pantalla

Tintín (Jamie Bell)es un joven periodista que, junto a su perro Milú, resuelve todos los casos que se propone. El joven aventurero, encuentra un día un secreto que estaba escondido en la maqueta de un
barco llamado El Unicornio, lo que le pone tras la pista del villano Ivan Ivanovitch Sakharine (Daniel Craig), este malvado cree que Tintín robó unos tesoros de la época del pirata Rackham el Rojo. Tintín se encontrará en su viaje con la ayuda del Capitán Haddock (Andy Serkis), que es un cascarrabias. Y los torpes detectives Hernández (Simon Pegg) y Fernández (Nick Frost). Esta búsqueda del secreto escondido en El Unicornio, les llevará a un viaje por todo el mundo donde tendrán que salvar peligrosos obstáculos.

Este es el primer proyecto que adapta el conocido personaje creado por Hergé en 1929. Por entonces era un Tintín mucho menos sofisticado y viajaba al país de los Soviets sobreviviendo a la amenaza comunista a través de viñetas en blanco y negro. Las 23 andanzas del reportero belga están muy marcadas por la ideología de su autor, aunque eso no puso impedimento a que Tintín llegara a millones de lectores en todo el mundo.

Según afirman, y con mucha razón, en la Butaca: 

"El proyecto de Spielberg-Jackson aborda ese replanteamiento deseado para el cine y se suma a la prominente motion capture, de la mano de WETA Digital. La tecnología, cada vez más en boga, demuestra ajustarse como un guante a la esencia de las viñetas, pese al debate que tanto ésta como otras películas recientes han generado en cuanto a los criterios de la Academia a la hora de incluirlas en la carrera a los Oscar®. Sea como sea, el más sofisticado uso de la técnica transforma aquí a los intérpretes en los personajes de Hergé sin que en el proceso se pierda la esencia gestual del actor tras la animación.”